Que complicados somos los seres humanos,
nos preocupamos por cosas que no valen la pena en esta tierra y no en la propia
vida, tenemos nuestra mirada puesta en cosas materiales o en personas no tan
apreciadoras de la caridad. Hoy tenemos y lo que tenemos lo queremos amontonar
hasta saciar nuestro ego, no sabiendo que la vida se hizo con el fin de
disfrutarla al máximo en toda situación. Damos la importancia a quien menos la
necesita, nos gastamos en convencerlos
para que fijen su mirada en nosotros cuando hay otros que hace tiempo piden de
nosotros la mas mínima atención, que nos dan sin esperar y simplemente los
ignoramos.Si Dios pudiera abrirnos los ojos de tal manera que viéramos como otros
viven, como otros dan gracias a Dios por lo poco que tienen, creo que entonces entenderíamos
el significado de apreciar en su totalidad. Que irónica es la vida, decimos
nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, pero también es cierto que
mientras no se aprecio es porque no se amó.La vida en su totalidad se hizo para amarla, para apreciarla, así que no
es responsable el ajeno de mi felicidad, es mi responsabilidad el encontrar muy
dentro de mí la razón para continuar positivamente, apreciando cada instante
sin renegar, pese a toda circunstancia.Yo misma me he encontrado en esta situación, y aunque digo muchas veces,
por qué? O si hubiera hecho esto quizá no estuviera hoy así! Pero en el instante
Dios me dice, no es por qué o si hubiera, es para que, simplemente para que!!No te preocupes por lo que tuviste o tendrás, mejor preocúpate por lo que
tienes y reparte a los demás, es que los regalos más valiosos en esta tierra no
tienen números, no se tocan, ni se miran, solo se sienten en el corazón. El ser
que verdaderamente vive jamás muere, porque si un día se marche de esta tierra
su legado, su semilla de amor seguirá dando fruto generación tras generación.
Recuerda que los puertos con las aguas más mansas son los que más importaciones
tienen. Vanidad de vanidades todo es en esta tierra, así que vive tus días como
si él hubiera y el hare no existieran.Feliz día! Tú amiga Ibeth.
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