"Si nunca le agradeces a Dios después de cada sonrisa entonces tampoco tienes el derecho de culparlo a él por cada lagrima. El ser humano por naturaleza tiene la mala costumbre de culpar y cuestionar a Dios por cada situación mala que está pasando, se olvida de él en los buenos momentos, pero cuando llegan los malos se toma la autoridad de responsabilisarlo y hacerlo culpable de sus problemas. En esta vida hay consecuencias, si son buenas o malas dependen de los hechos de la persona. Jamás esperes tener buenos resultados cuando tus actos han sido malos.
En los momentos buenos donde todo es alegría, la persona que vive sin temor de Dios, no se detiene por un instante para agradecer a El, las 24 horas que Dios le da día a día para vivir, las usa para hablar con otros de sus triunfos y supuesta buena vida, pide el consejo de otros, se olvida que Dios existe y vive sin temor a él pensando solamente egoístamente en su propio yo, deseando alcanzar la fortuna, fama y placer hasta su límite, pero cuando llega la consecuencia, el dolor y el llanto responsabiliza a Dios. Si no tomaste un tiempito, para preguntarle a Dios antes de tomar tus decisiones, cuando supuestamente eras feliz, entonces no lo culpes de tus lágrimas y soledad después. Aprende a contar con Dios siempre, aprende a caminar con él en todo momento. El ser humano que depende de Dios siempre tiene buenas consecuencias, encuentra paz y una salida en todo problema. Toma la decisión de contar con Dios hoy, aprende a depender de él en todo momento para que tus días sean buenos y llenos de amor.
Feliz y bendecido día para ti ;)
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