Se necesitan madres ayudando a otras madres en este
trayecto tan hostil y largo que el mundo tiene. Si pudiera cada una de las
mujeres darse la mano, concientizarse ante lo que ahora se ve como consecuencias
por el abandono, el mañana brillaria mejor. La mayoría de la juventud se pierde, así que es tiempo de ayudarse mutuamente,
informarse y sobre todo poner atención a cada una de las cosas que nuestros
hijos hacen, si esto sucede seguro que tendríamos menos criminalidad. Es tiempo
de que las madres dediquen cuidado a lo que Dios les dio, a la herencia que les
regalo con el fin de adiestrarlos para que lleguen a ser ciudadanos buenos y
dispuestos a luchar por un mejor futuro. Alguien dijo por ahí, nunca te
preguntes que tu nación puede hacer por ti, mejor pregúntate que tú puedes
hacer por tu nación.
No es momento de juzgarnos entre nosotras mismas, de
decir yo soy mejor mamá porque hago esto o deje de hacer aquello, es tiempo de
ayudar y eso empieza en nuestro propio hogar. La mujer muchas veces olvida el papel más importante que tiene en esta vida y es el de ser madre sobre todas las
otras responsabilidades. Madre no siempre significa que llevaste a un ser en tu
vientre por nueve meses, significa que lo adoptaste en tu corazón con el fin de
amarlo y cuidar de el hasta que se haga adulto. Madre es muchas veces una tía,
una madrastra, una hermana, una abuela y hasta una desconocida, el nombre
conlleva mucho más que dar a luz.
Así que mi pensamiento de hoy es para traer conciencia
ante este mundo que vivimos. Jóvenes en soledad, quitándose la vida, usando
calmantes y drogas para calmar su dolor o refugiados en un mundo solo donde no
quieren a nadie más que a su propio yo, no se sienten amados si no abandonados
porque mami prefiere pasar tiempo con otros y en otras cosas que ella llama
importantes que en su propio hogar.
Es tiempo del cambio, es tiempo de acercarnos a Dios y
poner nuestros instintos egoístas por un lado y pensar en darles a nuestros
hijos lo mejor de nosotros. Busca el reino de Dios primero y su justicia, luego
todas las demás cosas serán añadidas a ti sin que las pidas y es que Dios sabe
lo que te conviene.
Madres se necesita sabiduria de lo alto antes que la sabiduria de este mundo para ayudar a esta juventud, es momento de prestar el cuidado a nuestra herencia.
El cambio comienza en el hogar.
Madres se necesita sabiduria de lo alto antes que la sabiduria de este mundo para ayudar a esta juventud, es momento de prestar el cuidado a nuestra herencia.
El cambio comienza en el hogar.
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